A 1200 m sobre el mar se ubica esta poblada urbe de mucho interés y diversión. Al llegar al aeropuerto, muy cercano al la ciudad, da la impresión de ser un lugar pequeño, pero en Katmandú viven xxx, como es habitual los taxistas tambien me asaltaron a la salida, poco tarde en ser informado de actividades a realizar o alojamientos. En el barrio de Thamel se suelen alojar todos los turistas, las calles estan repletas de tiendas de ropa para montaña, agencias para contratar trecking, cibercabes, alojamientos y toda clase de servicios que puedan necesitarse. Viniendo de India, aquí ya tuve la oportunidad de relajarme, pues la gente es mas amable y aunque pueda tener interes para vender cualquier cosa ya no es tan agresivo y puedes sacar buenas conversaciones.
Excepto para ver Kathmandu Square (Swayambhau), cercano a Thamel, el resto es necesario el transporte (se pueden negociar taxis economicos). La ciudad comparte lugares hinduistas con budistas muy agradables de ver.