Bienvenido!

Si alguien pasa por aquí...

Dejé de actualizar el blog a mi nuevo regreso, después de dos años muy intensos que me llevo a recorrer 160857 km en dos etapas, usando todos los medios posibles, pisando los cinco continentes y recopilando un montón de energía.

Ahora se impone un descanso y valorar nuevos proyectos. A continuación y muy clásico sería escribir un libro, y es quizás que por ello no lo haga. Pienso en los más de 25mil clic que marcó mi cámara al volver y los momentos mágicos que capté, ese instante que llevo en mi mente y que visualizo fugazmente en mi salvapantallas. Tardaría 34 horas seguidas si tuviera que verlo todo en cinco segundos.

Pero dejando las estadísticas a parte, mi nuevo proyecto será fotográfico, una magnífica afición que descubrí junto con la de viajar sin tiempo limite. No comparto con quienes dicen que no son compatibles, que te pierdes detalles del viaje. Para nada,disfrazarse de turista "cámara colgada" y retarse a capar "el momento de forma presente" es una manera de magnificar los detalles.

Regresé para celebrar "Sant Joan" en familia, una muy buena tradición catalana llena de fuegos artificiales y risas, para mi siempre a sido como una segunda Navidad.

Siempre tengo en un rincón de mi pensamiento el continuar viajando (¿es adictivo?), mejor dicho vivir unos años más por esos mundos que tanto enriquecen. Poco después de mi regreso empece a imaginarme nuevos viajes y nuevos sueños que ilusionan. A ponerme nuevos retos y  a confeccionar mapas de las rutas.

Si continuas en el blog y lo visitas por primera vez verás que hay de todo y muy variado, desde sensaciones vividas a post que son meramente informativos; tipo guía (algo que use mucho en el viaje y que agradecí encontrar en blogs de otras personas que ya habían viajado)

Y para quien me haya leído o seguido, gracias, muchas gracias. Con viento a favor, volveré a colgarme la mochila un tiempo largo!

Ecuador: Cuenca


El avión de Quito a Cuenca no es excesivamente caro y de paso evité el desplazamiento en autobuses ecuatorianos, no tienen muy buena fama. Cuenca es también Patrimonio de la Humanidad igual que Quito, aunque de dimensiones mucho más reducidas y un ambiente más relajado, debe ser la ciudad con mayor calidad de vida del Ecuador. En la ciudad, donde se halla también la producción del famoso sombrero panameño, pueden verse multitud de iglesias, museos y monumentos de épocas coloniales. Fácilmente a pie, aunque existe un bus turístico, puede pasearse por los mayores lugares de interés.

Desde la ciudad salen varios tours, pero destaco el de Ingapirca, a 30 km de Cuenca y circulando por un paisaje increíble de montaña con vistas panorámicas espectaculares se llega donde se encuentran estas ruinas incas. Aunque el complejo es pequeño se hace necesario el guía que ofrecen para entender la historia de estas construcciones.

Ecuador: Quito

En mi primer viaje RTW tuve que descartar Ecuador por “agotamiento” del pasaporte, esta vez que volvía a Sudamérica no quería perderme Quito, la primera ciudad que fue declarada Patrimonio de la Humanidad y con razón. El centro histórico esta muy bien conservado y las construcciones datan de la época colonizadora, amplias plazas con esculturas rodeadas por iglesias, conventos y monasterios, mención especial a la Catedral de la Plaza Grande. La ciudad está bien comunicada por una línea de trolebús y los taxis son muy económicos y recomendables. El centro de la ciudad es posible visitarlo en un día con los descansos necesarios debidos a la altitud (2850 m sobre el mar). Por la noche la única zona recomendable es Mariscal, llena de restaurantes y bares, donde se encuentran los mejores alojamientos aunque la mayoría ruidosos.
Cerca de Quito, y en trasporte público, se puede llegar al complejo de la “Mitad del Mundo”, donde se divide la tierra en Norte-Sur y Este-Oeste, en pocas horas puedes ver todo lo que hay y volver por la tarde a la ciudad.
Coincidiendo mi estancia en sábado pude visitar el Mercado de Artesanía de Otavalo a dos horas de Quito, el más grande de Sudamérica al aire libre, lleno de artículos (la mayoría textiles) hechos por los indígenas de la región.
Es agradable que tanto la ciudad como el mercado no se encuentran muy masificados a nivel turístico y puedas compartir conversaciones con nativos.

Colombia: Antioquia

Santa Fe de Antioquia, Rionegro.

Los días de relax en San Andrés no fueron suficientes para recargar “pilas” e iniciar la aventura Centroamericana, decidí explorar un poco más Colombia, un país por el que realmente me siento atraído, y finalizar esta segunda aventura de seis meses descubriendo la Costa Pacífico colombiana antes de regresar.
Volví a pisar Medellín (hacía un año había descubierto esta agradable ciudad) tras pasar unos días divertidos en Barranquilla donde visité el curioso municipio de Puerto Colombia y la playa cercana de Santa Verónica en compañía de mi primo y amigos, todo ello sin olvidar que Barranquilla tiene uno de los mejores ambientes nocturnos de Colombia, aunque la ciudad en sí no apasiona.
Llegados a Medellín exploramos de nuevo la ciudad y nos acercamos a Santa Fe de Antioquia con una buseta desde la Terminal para un tranquilo paseo por calles empedradas de colorida arquitectura colonial e iglesias que te transportan al pasado, coincidiendo con la celebración de la Semana Santa.



Un país tan verde y montañoso, aunque bañado por dos océanos con espectaculares playas, en época de lluvias sufre mucho de inundaciones, deslizamientos y cortes de carreteras, las recomendaciones me hicieron desistir de llegar a la Costa Pacífico y quedará seguro para otra ocasión.
Un imprevisto corte de carretera hacia el aeropuerto de Medellín me hizo perder el vuelo de mi próximo destino (Ecuador) y pasar dos días más entre antioqueños, en Rionegro, ciudad destacada del Departamento por ser cuna de la independencia y poseer rica historia cultural. El Parque de la Libertad es un lugar agradable para tomar un café y admirar la Catedral de San Nicolás, para iniciar después un breve paseo por las calles de la localidad y ver algunas de las antiguas Iglesias construidas y acercarse al Puente Mejía.


Colombia: San Andres

La manera de llegar a la caribeña Isla de San Andrés es en avión, en Colombia el desplazamiento aéreo no es excesivamente caro y San Andrés no tiene una ruta comercial marítima organizada. Llegando de noche te pierdes el espectacular “Mar de los Siete Colores” que rodea toda la Isla, lo comprobé desde mi avión el día de mi partida. San Andrés es una isla relativamente pequeña y con una excesiva dependencia a los “todo incluido”.

Yo estuve alojado en una pequeña posada en el interior, en la Loma (http://www.posadasturisticasdecolombia.com/), zona mayoritariamente poblada por nativos de la Isla que tienen sus origines jamaicanos –es curioso el ingles criollo que hablan. En esta zona de la Isla junto con San Luis es donde se aprecia mejor la arquitectura de sus casas de madera pintadas de colores pastel de influencia caribeña. Las líneas de “busetas” recorren casi toda la Isla, siempre pasando por el centro (lleno de comercios), aunque es mejor usar la “moto-taxi” para desplazamientos cortos. El inconveniente es que a partir de las once de la noche tienen prohibido circular, aunque con el poco ambiente que hay tampoco importa mucho y acaba siendo más interesante una conversación en la Posada. Pasé dos semanas muy relajado en San Andrés, aunque con una semana es suficiente a no ser que se visite la Isla vecina de Providencia. El principal atractivo son las playas paradisíacas de blanca arena y mar cristalino, quizás la mejor combinación de colores mejor que nunca he visto. Comprobé que solo hay dos zonas con playas, en el Centro y en San Luis, el resto de la Isla es coralina y se quedó sin arena no hace mucho. No hay que perderse una salida al Acuario y al Johnny Key.

¡Imposible no llevarse un gran recuerdo del Mar de los Siete Colores, de la gente amable que habita en San Andrés y de la frutas tropicales que probé!

Brasil: Fin de Ruta

Brasil: Maranhao

Lençois Maranhenes
El desplazamiento desde Jericoacora a Barreirinhas iba a suponer una gran aventura, así te lo explican, en realidad si que existe una parte espectacular en el trayecto en 4x4 desde Tutoiá hasta Carubé te desplazas a traves del los Pequeños Lençois y la orilla de la playa durante una hora, más tarde se toma una lancha hasta Barreirinhas (1h), el resto del trayecto se realiza por carretera. La manera más rápida de desplazarse es compartiendo el vehículo ya que sino la multitud de enlaces entre las localidades y diferentes medios de transporte te impiden llegar el mismo día.

No dudo en decir que la visita a los Grans Lençois Maranheneses es uno de los paisajes más espectaculares que ví en Sudamérica, por su extensión (300km2), por sus excepcional característica (dunas y lagunas al mismo tiempo), por sus colores y por la tranquilidad que existe allí cuando paseas encima de las dunas o observas la inmensidad del conjunto.
  
Sao Luis
Fin de trayecto en Brasil, mi segunda visita al país. Desde Barreirinhas tomé un taxi a Sao Luis Taxi (3h) por el mismo precio del autobús.
Estaba visitando la capital del reagge y la ciudad colonial mejor conservada del Nordeste. Debía haber tomado algunas advertencias… la música sólo suena los fines de semana y el estado de conservación del centro histórico es muy relativo, no he visto el resto de ciudades coloniales. Sao Luis sigue pendiente de restauración hace muchos años y a este ritmo muchos más, aunque no por ello deja de tener su encanto. Las playas no son mucho mejor, la visual del horizonte en el mar está llena de barcos cargueros. Música reagge en Bar de Porto.
En fín, es un lugar de paso para muy pocos días, obligatorio vengas de Lençois o de Belem.

Brasil: Nordeste

Pipa, Genipabu, Canoa Quebrada, Jericoacora.



El día después del Carnaval de Olinda los transportes estaban saturados y tuve la suerte de compartir un taxi hasta Pipa (4h), nuestra sorpresa fue que en Pipa el Carnaval tiene un día extra!... la fiesta no termina y menos en Pipa donde abunda el ambiente nocturno. Quizás sea el lugar más turístico del Nordeste con esplendidas playas para aprender surf (Praia do Madeiro) o para pasear (Praia do Amor), es necesario informarse sobre las mareas baja y alta para el acceso a algunas playas. Un buen lugar para estar bastantes dias.

Evitando las estancias en ciudades me desplacé a Genipabu desde Pipa. Un autobús de 2h me llevó a la Terminal Rodoviaria de Natal y de ahí un taxi de 30 min a Genipabú. Un lugar más bien pobre en servicios y alojamiento donde hay unas espectaculares dunas bien atendidas por montones de Buggys. La experiencia de adrenalina en el circuito vale la pena. Con un día es suficiente.

Llegar a Canoa Quebrada me dio la sensación de haber llegado muy lejos en Brasil, ya sea por las distancias del transporte o por las pocas poblaciones que ves durante el desplazamiento. El autobús de Natal a Aracati (localidad a 15km de Canoa) dura 6h y perfectamente puedes estar dos horas sin ver más que campos de arbusto, acompañado de un aire acondicionado de congelador!. Llegando de noche a Aracati la opción hasta Canoa es el taxi, que evidentemente ya están esperando. Es importante hacer coincidir el fin de semana con Canoa porque el resto de días está muy vacío. Es un paisaje muy curioso donde los erosionados acantilados rojizos parece que amenacen con engullirse la playa. Los buggys también están de moda aquí.

En mi opinión Jericoacara es el mejor lugar de la Costa Nordeste de Brasil. Quizás por el difícil acceso a la localidad, sólo llegan 4x4 o camiones jardinera desde Jijoca que cruzán caminos arenosos y playa durante una hora hasta llegar al Parque Nacional donde está ubicada. O por ser un lugar tan remoto el ambiente sea más relajado aunque no carente de ambiente bien avanzada la noche. Con un ligero toque místico no habitual en Brasil (similar a Boipeba y Trancoso), y como de un ritual se tratara, por la mañana con la marea baja se suele ir a la playa y relajarse, más tarde observar como sube la marea y sorprenderse donde estabas al principio del día. Seguido, la duna Por do Sol (presente en todo momento) se empieza a llenar de personas que acuden a ver la puesta y al acabar disfrutan de las Capoeiras en la playa. También existen también circuitos en Buggy a lagunas, o simplemente caminar por las playas es una actividad privilegiada. Para llegar a Jeri desde Canoa es necesario un autobús hasta Fortaleza (3h) y otro hasta Jijoca (6h).

Brasil: Olinda


Carnaval!

El Carnaval de Brasil no tiene palabras, hay que vivirlo. En Olinda es más tradicional y a pesar de que hay “blocos”, no es muy espectacular y se vive a pie de calle con muchísima “cerveja”, dia y noche. Los “blocos” circulan de modo anárquico al son del “frevo” y las “batucas” por las callejuelas donde la gente se va uniendo al baile y ritmo. En Olinda no playas, o sí, pero mejor será respetar la advertencia de tiburones. Desde el "Alto da Se" hay buena vista del Skyline de Recife a 8km de Olinda.

Brasil: Porto de Galinhas

Morro de Sao Paulo-Salvador de Bahía-Maceió-Maragogi-Porto de Galinhas.

Brasil_ Porto de Galinhas

Recordaré durante tiempo este trayecto, sobre todo por las casi tres horas infernales de catamarán hasta Salvador desde Morro de Sau Paulo. Más tarde, casi dos horas cruzando en bus urbano Salvador hasta la terminal de Onibus para tomar el viaje de noche en bus 10h hasta Maceio. Desde ahí tres horas y media más hasta Maragogi donde me hospedé un día, el lugar dá para poco más y a mí impresión no es un punto fuerte de esta costa, se puede visitar desde Porto de Galinhas. Para el acceso a Porto Galinhas desde Maragogi hay que bajar en a Ipojuca y tomar un micro.
Porto Galinhas es un lugar agradable para quedarse varios dias. Tiene varias playas de Surf, y una calle peatonal llena de actividad. Al final de esta calle está la playa y por la noche hay bares con música en directo, uno puede sentarse en las jangadas (embarcaciones típicas) y pedirse un caipirinha de los improvisados vendedores. Otra actividad recomendable es ir hasta el Pontal de Maracaípe y ver la desembocadura del rio (mejor paisaje con marea baja).

Brasil: Costa do Dende

Itacaré, Taipus da Fora, Boipeba, Morro de Sao Paulo

Un único autobús diario directo desde Porto Seguro lleva a Itacaré en 8 horas. En Itacaré todo se concentra en la calle principal de la zona de Pituba (bares, restaurantes y hospedajes). En la costa hay pequeñas playas frecuentadas por surfistas. El acceso a la playa Prainha empieza en la playa de Ribeira y no es fácil después de un día lluvioso.

No hay transporte público para llegar a Taipús de Fora desde Itacaré si cruzás el ferry que sale de ahí desaparece el asfalto y sólo es posible con transporte privado. La alternativa es ir en ómnibus hasta Camamú (1h) y allí tomar la lancha de 30 mins que va a Barra Grande. La mejor opción para alojarse en la Península de Maurú es Barra Grande para evitar los elevados precios de Taipús de Fora. Se puede llegar con un motociclista a las piscinas naturales de la Playa de Taipús por el interior o hacer una esplendida caminata de dos horas desde la Playa Ponta da Mutá. Si hay música en directo en Café do Mar de Barra Grande vale la pena acercarse.

Para llegar a Boipebá desde Barra Grande hay que volver a Camamú y tomar un ómnibus (1,40h) para llegar a Valença y tomar una lancha de una hora que atraviesa los canales y rios bordeando los manglares hasta llegar a Boipebá. El efecto de la marea baja es sorprendente caminando hasta Moreré (2h) por las playas, se forman piscinas naturales y se puede llegas hasta la última playa llena de cocoteros. Para la vuelta desde Moreré se puede tomar un tractor que te lleva por el interior de la isla a traves de caminos de arena. El ambiente es sencillo y relajado.

Desde Boipebá puede tomarse una lancha rápida (50 min) hasta Morro de Sao Paolo. Es uno de los lugares con más marcha de la costa de Bahía con playas con ambiente y restaurantes, sin vehículos y con muchos turistas. El pequeño pueblo está situado en la cima de una colina y sus calles son de arena. Desde la Segunda Praia hasta Cuarta Praia es difícil bañarse con la marea baja y cuando la marea sube prácticamente desaparece la playa.

Brasil: Costa do Descubrimento

Porto Seguro, Trancoso y Arraial d´Ajuda.
 
De Paraty a Porto Seguro me pareció una distancia excesivamente larga para realizarla por carretera. Esta vez quería evitar la parada en Rio de Janerio que ya hice en mi primer viaje a Brasil. Así entonces, autobús hasta Rio (8h) para enlazar con el vuelo hasta Porto Seguro, un lugar que sólo recomiendo una parada para tomar el ferry a Arraial y Trancoso.

Llegar al “Quadrado” de Trancoso cuando empieza a iluminarse de noche es una sensación agradable. El “Quadrado” es una plaza rectangular llena de un manto de hierba bordeada por casas de colores con buen gusto iluminadas y en el fondo una pequeña iglésia blanca. Trancoso mereció más de las cuatro noches que pasé alojándome en una cuidada posada (Bom Astral).

Las playas de Trancoso, dos Coqueiros y dos Nativos, son extensas y de olas suaves, desde dos Nativos hacia el norte puede caminarse por la playa solitaria y desierta (Praia Rio da Barra) que llevan a los enormes acantilados que bordean la playa de Taipé (1h).
 
El autobús de línea me llevó a Arraial d´Ajuda donde encontré más variedad de alojamientos y bares con más ambiente, música en directo. En definitiva un lugar mayor que Trancoso con buenas playas acondicionadas con “barracas” y clubs. El acceso a los acantilados de Taipé está a 40min de la Praia de Pitinga.

Brasil: Paraty

De Sao Sebastiao sólo hay dos servicios diarios de Omnibus y es fácil que se agoten las plazas como sucedió. En este caso la solución es ir de pueblo a pueblo con Litorenea en semiurbanos hasta Ubatuba donde parten buses con más frecuencia.
Me sorprendió el lugar por el buen estado de conservación del centro histórico, todo lleno de blancas casas con puertas y ventanales de colores y calles de adoquines. Un lugar imprescindible en la ruta costera brasilera.
Aunque el lugar carezca de playas recomendadas, puede accederse a islas increíbles con muy buenas playas en un tour organizado en goleta con buena música en directo incluida. También puede acercarse uno a las playas de Trindade en un trayecto de 40 min.
Más fototografías

Brasil: Costa Paulista

Brasil_ Illhabela
Guarujá, Maresias, Ilhabela, Ubatuba.
Para un paso de seis días por esta costa sólo pude elegir dos destinos, hay que armarse de paciencia para desplazarse de un lugar a otro, entre ferrys y enlaces de autobuses. Maresias y Ubatuba quedaron para otra ocasión, me hablaron muy bien de este último.
De Ilha do Mel a Guarujá (mi primera parada en la Costa Paulista) tuve que volver a Curitiba y de ahí a Santos (6 h), una vez en Santos bus hasta el ferry que cruza a Guarujá, y bus hasta la terminal para enlazar con otro para llegar a la Praia Enseada, tranquilamente pasé todo el día desplazándome!
Guarujá tiene muy buenas playas aunque en el paisaje se sustituyen las palmeras y cocoteros por enormes edificios. Por lo demás ofrece todo lo que una población densamente habitada tiene.
De la terminal de Omnibus de Guarujá a Sao Sebatiao para tomar el ferry a Ilhabela demora un par de horas. Ilhabela es una isla agradable protegida en un 85% de su superficie donde pasan fines de semana y vacaciones adinerados paulistas. Sino se tiene vehículo el transporte en autobuses es una solución aunque no muy eficaz ya que la frecuencia es baja y el acceso a las mejores playas solo puede hacerse con caras excursiones en 4x4. Son muy molestos los “borrachudos”, una especie de mosquitos de día y de noche que su picadura puede durar hasta una semana. A pesar de usar repelente no recomendaría la isla por esta importante molestia.

Brasil: Ilha Do Mel

Brasil_ Ilha Do Mel
Desde Curitiba tomé el tren escénico Serra Verde Express, un recorrido de tres horas por la abundante vegetación de la Mata Atlántica que tiene destino a Morretes (o Paranaguá también sólo los domingos), transcurre bordeando acantilados y atravesando puentes, bajando hasta nivel del mar desde los 1100 metros de altitud de Curitiba.
Para llegar a Ilha do Mel es necesario el embarque en el ferry de Paranaguá (1,5h de trayecto) o en Pontal do Sul (30min). En Morretes, la parada final del tren entre semana, se toma un bus de 1h hasta Paranaguá.
Una vez llegado a Ilha do Mel es difícil elegir en que punto establecerse; Encatandas vive más de cara al mar; en Brasilia existe más comercio; y en Fortaleza muy poca actividad. Cualquier lugar es bueno, una caminata de tres horas bordeando el mar te lleva de un extremo al otro de la Isla, llena de playas para todos los gustos (Praia Grande, Praia do Farol, Praia do Fotaleza).
No existe ningún vehículo motorizado, y en todo momento se tiene la sensación de estar en una isla virgen y existe la tentación de aventurarse entre la vegetación para ver que puede descubrirse.

Brasil: Curutiba

Brasil_ Curitiba
Ubicada en un altiplano, es una de las ciudades más organizadas del país debido a sus avances en transporte y sede de empresas de alto nivel económico. Existe un bus turístico de fácil uso que destaca los mayores puntos de interés de la ciudad, en particular el Jardín Botánico, el Museo Oscar Niemeyer y el Centro Histórico.
Es el punto de partida del tren panorámico Serra Verde Express que llega hasta Morretes o Paranaguá

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