Guarujá, Maresias, Ilhabela, Ubatuba.
Para un paso de seis días por esta costa sólo pude elegir dos destinos, hay que armarse de paciencia para desplazarse de un lugar a otro, entre ferrys y enlaces de autobuses. Maresias y Ubatuba quedaron para otra ocasión, me hablaron muy bien de este último.
De Ilha do Mel a Guarujá (mi primera parada en la Costa Paulista) tuve que volver a Curitiba y de ahí a Santos (6 h), una vez en Santos bus hasta el ferry que cruza a Guarujá, y bus hasta la terminal para enlazar con otro para llegar a la Praia Enseada, tranquilamente pasé todo el día desplazándome!
Guarujá tiene muy buenas playas aunque en el paisaje se sustituyen las palmeras y cocoteros por enormes edificios. Por lo demás ofrece todo lo que una población densamente habitada tiene.
De la terminal de Omnibus de Guarujá a Sao Sebatiao para tomar el ferry a Ilhabela demora un par de horas. Ilhabela es una isla agradable protegida en un 85% de su superficie donde pasan fines de semana y vacaciones adinerados paulistas. Sino se tiene vehículo el transporte en autobuses es una solución aunque no muy eficaz ya que la frecuencia es baja y el acceso a las mejores playas solo puede hacerse con caras excursiones en 4x4. Son muy molestos los “borrachudos”, una especie de mosquitos de día y de noche que su picadura puede durar hasta una semana. A pesar de usar repelente no recomendaría la isla por esta importante molestia.